La actriz no tuvo piedad con los conductores de TV luego de que la cruzaran por su supuesta postura a favor del gobierno durante la crisis en el INCAA.
La actriz Verónica Llinás destrozó a los conductores Eduardo Feinmann y Jonatan Viale después de que se hiciera eco en LN+ de un tuit falsamente atribuido a ella con su supuesta opinión sobre la crisis en el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA).
Todo comenzó cuando, en el habitual pase entre ambos programas en el canal de televisión que se atribuye a Mauricio Macri, Feinmann y Viale se hicieron eco de ese posteo apócrifo y se burlaron de la artista.
La actriz les respondió con dureza pero con altura, como es su estilo, en su cuenta de Twitter verdadera. “No pidieron disculpas ni @JonatanViale ni @edufeiok por burlarse de mí con un tweet falso. Y eso que los traté con todo el respeto que no se merecen”, comenzó.
“Tal vez, si los hubiera llamado Eduardo Fakeman y Gordito Llorón habría tenido más visibilidad. Pero no, me parecería más a ellos”, acotó la exintegrante de “Las gambas al ajillo”.
La actriz posteó con ironía: “Toda mi solidaridad con los troll centers y servicios, que deben estar tiki tiki tiki buscando algún archivo mío en algún acto, en algún spot, alguna nota hablando maravillas (o simplemente bien) del kirchnerismo, o contra el Fondo…”.
Siguiendo esa línea, avisó que aquellas personas que cobran para criticar al gobierno de Alberto Fernández buscan “un mísero archivo para que los Feinmann, los Viale y los Espert de la vida” puedan taparle bien la boca y volver a ridiculizarla mediáticamente, “planteando una guerra de un millón contra uno”.
“Lo siento muchachos, no lo van a encontrar. ¿Saben por qué? Porque ese archivo no existe. ¿Podemos ahora hablar de lo importante?”, continuó Llinás.
En otro tuit, en el que advirtió que “un país sin cultura es un país embrutecido y básico, un rebaño fácilmente manejable a fuerza de operaciones y fake news”, acotó que “la libertad que todos ansiamos depende de ella porque la ignorancia es una forma de esclavitud”, y cerró sosteniendo que “fomentar la cultura es fomentar la libertad”.
A un tuitero que la cruzó diciendo de Guillermo Francella, Ricardo Darín o Juan José Campanella “difícilmente necesiten un subsidio” del INCAA, le recordó que “casi todos los países del mundo fomentan su cine”, pero “lo importante es que entiendan que ese dinero no sale del bolsillo de nadie. Tampoco iría al bolsillo de nadie”.
En el pase del lunes último, Feinmann y Viale se hicieron eco del supuesto tuit de la actriz que decía: “Después de 4 años de hambruna neoliberal, al fin podemos volver a un cine clasista, combativo, antifachx y contracultural. Gracias, alberto”.
Allí fue que Llinás apeló a su cuenta verdadera y lo desmintió de manera tajante. “Esto es un fake”, y “yo no hablo ni escribo con la x, sé que ´al fin´ se escribe separado, que los nombres propios con mayúsculas y pongo bien las comas. Además de que jamás podría haber dicho semejante cosa”, concluyó.
No es la primera vez que Feinmann y Viale castigan a la actriz, pero en general lo hacían por sus opiniones reales.