El Cuarteto del Diálogo Nacional recibió el galardón \”por su contribución decisiva a la construcción de una democracia pluralista\” en ese país, dijo la academia.
El Cuarteto del Diálogo Nacional tunecino recibió este viernes el premio Nobel de la Paz “por su contribución decisiva a la construcción de una democracia pluralista” tras la Revolución de los Jazmines de 2011, anunció el comité Nobel noruego.
El Cuarteto se formó a mediados de 2013, en un momento en el que el proceso de democratización peligraba por los asesinatos políticos y los importantes disturbios sociales.
La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, celebró este viernes la elección del comité Nobel de otorgar el galardón de la Paz al Cuarteto del Diálogo Nacional tunecino, subrayando que “muestra el camino para resolver las crisis en la región”.
“El Nobel de la Paz al Cuarteto del Diálogo Nacional tunecino muestra el camino para resolver las crisis en la región: unidad nacional y democracia”, escribió Mogherini en su cuenta de Twitter.
El grupo, compuesto por el UGTT, sindicato histórico de Túnez y símbolo de la independencia, la patronal Utica, la Liga Tunecina de Derechos Humanos (LTDH) y la orden de los abogados, organizó un largo y complicado “diálogo nacional” entre los islamistas y sus opositores, obligándolos a sacar el país de su parálisis institucional.
Mogherini visitó Túnez en marzo junto con el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, para reforzar la cooperación con este país golpeado por dos mortíferos atentados terroristas dirigidos contra uno de los principales sectores económicos del país: el turismo.
Túnez, en donde comenzó la Primavera árabe, es el único país que logró completar su transición hacia un sistema democrático.
Reaccionando al premio, Tusk felicitó al Cuarteto del Diálogo Nacional. El presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, dijo que el galardón era “ampliamente merecido”.
La comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmstrom, que anunció esta semana un viaje a Túnez en el marco de las negociaciones de un acuerdo comercial con la UE, estimó que el premio era “bien merecido”.
“El camino tunecino hacia la democracia fue una fuente de inspiración y esperanza para todos nosotros”, dijo Malmstrom a la AFP.
El papa Francisco, que era uno de los candidatos junto a la canciller alemana Ángela Merkel, quedó en el camino.