Pablo Grasso, hasta ayer presidente del Concejo Deliberante local, es el nuevo jefe comunal de la capital santacruceña.
Pablo Grasso asumió como intendente de Río Gallegos tras la renuncia del ex jefe comunal, Raúl Cantín, luego de un conflicto con los empleados municipales que lleva cuatro meses.
Grasso, integrante del Frente para la Victoria, era el presidente de la legislatura local y precandidato a intendente en las próximas elecciones.
Cantín explicó que su renuncia fue una decisión adoptada “en forma conjunta” con su gabinete, además de “tratada con los secretarios presentes”.
“A mí nadie me pidió la renuncia; al contrario, he tenido el acompañamiento permanente del gobierno nacional y de todos los compañeros del Justicialismo, y seguiremos luchando en el día a día por el bienestar de nuestra querida ciudad”, afirmó el intendente saliente.