Los desechos son convertidos en astillas, chips, virutas, fibras y pallets, entre otros productos y utilidades.
El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, inauguró hoy la nueva planta para el tratamiento de restos forestales y de poda en el Centro de Reciclado de avenida Varela, en Villa Soldati.
“Estamos poniendo a Buenos Aires en una posición de avanzada en materia de políticas ambientales y vamos a seguir en esa línea con el objetivo de llegar en los próximos años a cero toneladas de disposición final en el CEAMSE”, afirmó.
Y dijo estar seguro de que “Horacio Rodríguez Larreta en la próxima gestión lo va a terminar de lograr”.
Macri estuvo acompañado por el Jefe de Gobierno electo y por el ministro de Ambiente y Espacio Público, Edgardo Cenzón.
La unidad para el tratamiento de los residuos forestales tiene capacidad para procesar 18 mil toneladas anuales de este tipo de basura, que es recogida durante las temporadas de poda y los trabajos de parquización en las superficies verdes de la Ciudad, tanto a nivel público como privado.
Los desechos son convertidos en astillas, chips, virutas, fibras y pallets, entre otros productos y utilidades.
En el predio de la avenida Varela 2563 ya funciona la planta para el tratamiento de residuos áridos provenientes de los materiales de construcción.
Además, está prevista la inauguración de otra planta para el tratamiento de materiales orgánicos y está en marcha la construcción de un Centro Verde Automatizado para el reciclaje de envases de botellas PET.
Las obras previstas incluyen también el montaje de un Centro Educativo concebido con la idea de que los chicos en edad escolar puedan conocer y aprender cómo se recicla la basura que genera la Ciudad.
La tarea que se desarrolla en Centro de Reciclado Varela se enmarca dentro de las metas establecidas en la ley de Basura Cero, cuyo objetivo principal es reducir la disposición final de residuos a través de la separación en origen, la recuperación y el reciclado.
Actualmente la Ciudad logró disminuir en un 50 por ciento, con relación a diciembre de 2012, la cantidad de residuos que se envía a los rellenos sanitarios, bajando ese volumen de 6.000 a 3.000 toneladas diarias.