La joven tiene que desprenderse de los regalos por 2,6 millones de dólares que le hizo el millonario, suspendido de por vida de la NBA por sus comentarios racistas.
Una Ferrari, un Bentley, un propiedad de 1,8 millones de dólares y hasta una tanga de encajes de 12 dólares, son varios de los regalos que el ex dueño de los Clippers Donald Sterling hizo a su joven amante Vanessa Stiviano, y que ésta deberá regresar.
Una corte de Los Angeles falló este miércoles que Stiviano deberá regresar los regalos que le hizo Sterling, valorados en cerca de 2,6 millones de dólares, y que según el juez Richard Fruin son considerados propiedad del patrimonio familiar, informó el diario Los Angeles Times.
El juez respondió así a la demanda de Shelly Sterling de recuperar todo lo regalado por su ex marido a Stiviano, de origen afromexicano y cuyo verdadero nombre es María Vanessa Perez, aunque utilizó también alias como Mónica Gallegos, Vanessa Pérez y María Valdéz.
Durante la sesión en la corte se escuchó una grabación tomada con un iPhone en la que se escucha a Stiviano y al multimillonario de 80 años de edad discutir sobre cómo proteger de su esposa los regalos que le hizo a su amante.
“La verdad es que todo lo que tengo, me lo has dado desde el corazón, sin tener que mendigar, o pedir, o tirarme encima de ti”, dijo Stiviano en un fragmento escuchado en la corte.
Mac Nehoray, abogado de Stiviano, dijo que su clienta apelará la decisión.
“Estamos muy decepcionados. Los jueces se supone que deben interpretar la ley, no hacerlas”, dijo Nehoray.
La lista de gastos de Sterling en su amante fue publicada por el LA Times e incluye entre otras una Ferrari, un Bentley, una casa de 1,8 millones de dólares en Beverly Hills, unas sandalias Chanel de 695 dólares, un traje de conejito de Pascua (391), unas zapatillas Kobe (140).
También, según el diario, una tanga de encaje (12) y hasta una donación de un dólar al Hospital Infantil de Investigación St. Jude, como parte de una compra en una tienda CVS, pagada con una tarjeta de Sterling.
Shelly Sterling ganó el control de los Clippers el año pasado después de una batalla legal con su marido. Más tarde vendió la franquicia a Steve Ballmer por 2 mil millones de dólares.
Donald Sterling fue suspendido de por vida de la NBA por sus comentarios racistas durante una discusión con Stiviano, quien los hizo públicos en un portal de noticias de farándulas.