\”Todo niño que no ha nacido, pero injustamente es condenado a ser abortado, tiene el rostro de Jesucristo\”, afirmó.
El papa Francisco pidió hoy (viernes 20) a los médicos católicos que se nieguen a practicar abortos, con lo que emitió un mensaje claro luego de que él mismo criticara a la iglesia por su obsesión con “reglas mezquinas” que alejaron a los fieles.
Durante una audiencia con ginecólogos católicos, el Papa pareció ofrecer así una rama de olivo a los sectores más doctrinarios y conservadores de la iglesia al recordar que El Vaticano ha defendido la vida desde la concepción.
Denunció la “cultura del deshecho” que justifica disponer de una vida.
“Todo niño que no ha nacido, pero injustamente es condenado a ser abortado, tiene el rostro de Jesucristo, el rostro del Señor”, afirmó.
En una entrevista publicada el jueves, Francisco pidió a la iglesia ser más compasiva y concentrarse menos en las reglas, lo que representa un cambio radical de prioridades para un sumo pontífice.