La demanda exterior por exportaciones y turismo, que hasta el momento permitía al país mantenerse a flote, ya no es suficiente y cae la inversión.
España se hundió un poco más en recesión en el segundo trimestre del año, con un retroceso del PBI del 0,4% con relación al primero en que ya había bajado 0,3%, según cifras definitivas publicadas hoy (martes 28).
Este indicador es idéntico a las cifras adelantadas el 30 de julio y pone en evidencia la difícil situación de la cuarta economía de la zona euro, mientras aumentan las probabilidades de que el país solicite un rescate financiero.
En un comunicado, el Instituto nacional de estadísticas (INE) explica que la demanda nacional -especialmente el consumo y el gasto público- tiene un impacto cada vez más negativo sobre el PBI, en momentos en que España es sometida a una severa cura de austeridad.
En un contexto de desaceleración de la economía mundial, la demanda exterior -exportaciones y turismo- que hasta el momento permitían al país mantenerse a flote, ya no es suficiente.