En total gastaron 45.000 millones de pesos, 90% más que en el mismo período del año pasado, cuando persistían algunas restricciones por la pandemia.
El fin de semana largo por Semana Santa y Pascuas dejó un balance de 2.612.000 turistas y otros 2.350.800 excursionistas que recorrieron más de mil ciudades del país a Argentina que forman parte del circuito turístico nacional y gastaron 45.100 millones de pesos.
A precios constantes, el gasto fue 91% mayor que en la misma celebración de 2021, según informó hoy la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Según detalló la entidad, la estadía media fue de 3,3 días y el gasto diario “per cápita”, de 4.610 pesos. “El fuerte crecimiento se explica porque viajaron 37,5% más de turistas y 1,4% más de excursionistas, y también porque aumentó 10% la estadía promedio y el gasto diario creció considerablemente, más allá del efecto inflación”, precisó la CAME.
Los 2,6 millones de turistas desembolsaron 39.736 millones de pesos este fin de semana extra largo, incluyendo hospedaje, transporte, comida y otros gastos, mientras que respecto de 2021 el consumo a precios constantes aumentó 107,7%.
A los turistas se agregaron casi 2,4 millones de excursionistas que decidieron viajar por el día a ciudades cercanas en busca de ocio, recreación, deportes, festejos religiosos o encuentros familiares.
Cada uno gastó en promedio 2.282 pesos sumando un desembolso total de 5.365 millones de pesos que, a precios constantes, resultó 19,9 por ciento mayor al mismo fin de semana de 2021.
Según el ministerio de Turismo y Deporte, alrededor de 300 mil personas viajaron con el PreViaje, el programa que devuelve el 50% de lo gastado en turismo en crédito para volver a usar en servicios del sector como gastronomía, excursiones o pasajes.
Por otra parte, y gracias a la debilidad del peso, se notó el regreso del turista internacional, especialmente de residentes de países vecinos como Brasil, Chile, Uruguay y Paraguay que acudieron a las grandes ciudades y a aquellas cercanas a las fronteras.
Desde Uruguay, según datos oficiales, ingresaron a Argentina más de 130.000 turistas, por ejemplo.
Los mejores números en ocupación los tuvieron las provincias del noroeste, que promediaron el 97%, aunque el país entero trabajó con su capacidad de alojamiento colmada.
“Dos factores que obstaculizaron la fecha fueron la falta de gasoil y el paro de transportistas por la escasez de ese insumo”, indica el informe de la CAME.
En efecto, hubo filas de camiones de hasta 20 kilómetros que complicaron el tránsito en las rutas con demoras importantes, especialmente en Santa Fe y Entre Ríos.
Aerolíneas Argentinas transportó durante el fin de semana más de 300.000 pasajeros con lo que batió el récord de 2018, que había sido histórico.
En casi todas las ciudades turísticas se cumplió un mismo patrón: los alojamientos de mayor categoría trabajaron al 100%, y fueron los primeros en cubrirse.
Buenos Aires tuvo un nivel de ocupación del 90 por ciento y entre los lugares m´pas elegidos estuvieron Mar del Plata, Cariló, Vila Gesell, Mar de las Pampas, Pinamar, Mar del Tuyú, San Clemente del Tuyú, Las Toninas, Santa Teresita, Costa del Este y San Bernardo. En el interior de la provincia hubo centenares de actividades por Sierra de la Ventana, Villa Ventana, Tigre, San Pedro, La Plata, Chascomús y Tandil, que trabajó al 100%.
En la Ciudad de Buenos Aires hubo casi 100 mil turistas nacionales e internacionales con un pico del 91% de ocupación hotelera y un gasto total de casi 3.100 millones de pesos.
En Córdoba, las más de 160 mil plazas de alojamiento quedaron casi colmadas con turistas de todo el país y el regreso de los visitantes internacionales.