La temprana eliminación del PSG en la Champions League desató la ira de los barras parisinos, que por primera vez dan signos de xenofobia contra los dueños del club.
París pasó a ser la ciudad de la furia en lugar de la “luz” que la caracteriza tras la dura y temprana eliminación del Paris Saint-Germain de Lionel Messi, Neymar y Kylian Mbappé de la Champions League.
A los silbidos as Messi, Neymar y el DT, el argentino Mauricio Pochettino, se sumaron este lunes pintadas contra el manager, el brasileño Leonardo, y los jeques qataríes que aportan los millones de dólares necesarios para sostener una plantilla con tantas figuras de renombre mundial.
“París no será nunca Qatarí”, “París es nuestro” o “Leonardo y Al Khelaïfi, NTM” ( un insulto referido a sus madres), fueron algunos de los intimidantes graffitis que aparecieron en los muros exteriores del estadio donde el PSG juega como local.
También fueron vandalizados los edificios de una sede ubicada en Boulogne y el centro de entrenamiento Camp des Loges, en Saint Germain en Laye.
Es la primera vez desde la llegada de capitales de Medio Oriente en 2011 que los barras franceses se manifiestan en contra, con mensajes xenófobos contra los dueños extranjeros.