Santiago Mazzini llevaba 93 días escapándose de la Justicia por el crimen de Julián Giménez, al que aplastó con su camioneta tras una discusión de tránsito.
Santiago Mazzini, el abogado que atropelló y mató al piloto Julián Giménez a comienzos de agosto pasado en medio de una pelea de tránsito, fue capturado hoy tras 93 días prófugo luego de un desliz de su padre en una llamada telefónica que permitió ubicarlo.
Cuando el Grupo Halcón ingresó al domicilio donde lo habían ubicado, Mazzini se indignó porque le derribaron la puerta. Lo que dijo después, con una actitud belicosa, fue más indignante todavía: “Eh, ¿por qué me rompieron la puerta? Yo no soy un delincuente, me rompieron toda la entrada y no soy un delincuente”, afirmó.
El final de los días del abogado como prófugo comenzó a darse el pasado 28 de septiembre, cuando su padre tuvo una breve charla por teléfono con su pareja. Habló de cómo habían celebrado el cumpleaños de su nieto. Curiosamente, también mencionó a su hijo Santiago. Aseguró que al chico “lo saludó por la medianera”. Fue un desliz, ya que el padre no sabía que estaba siendo escuchado con una intervención telefónica ordenada por la Justicia para hallar a su hijo prófugo.
La DDI de San Isidro de la Policía Bonaerense, dirigida por el comisario mayor Néstor Muñoz y a cargo de encontrarlo, tenía una cierta idea de qué casa podía estar hablando el padre. La mención a la medianera también fue clave. Les sonaba a la casa del hermano menor de Mazzini, ubicada en la calle Rafael Obligado, zona de Don Torcuato. Enviaron un drone para realizar una vista aérea.