Los asalariados recibirán una suma fija de 4.000 pesos en agosto y un incremento del 9% para noviembre.

La Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (Faecys) y las tres cámaras empresarias del sector acorsaron en el Ministerio de Trabajo un aumento paritario del 9% para noviembre y junto a una suma fija de 4.000 pesos en agosto el incremento salarial para el período 2020-21 será del 42%

“El acuerdo obtenido fue auspicioso para recuperar el poder adquisitivo salarial de los mercantiles, luego de una férrea gestión en defensa de los más de un millón de trabajadores de la actividad”, sostuvo el titular del sindicato, Armando Cavalieri, en un comunicado.

La suma fija de agosto y el 9 por ciento que percibirán los trabajadores en noviembre próximo implicarán una mejora salarial del 42 por ciento para el período, luego de haber obtenido en abril último en cuatro tramos una recomposición del 32 por ciento.

La reapertura de la paritaria y el adicional obtenido fue consecuencia de la ejecución de la cláusula de revisión salarial para “neutralizar la embestida inflacionaria y las oscilaciones de una endeble economía”, señaló el titular de Faecys, la organización sindical más numerosa del país, con 1,2 millones de afiliados.

En el encuentro fiscalizado por Trabajo participaron los gremialistas Cavalieri, Carlos Pérez y Jorge Bence y, por el sector patronal, lo directivos de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (Cacys), Pedro Etcheberry y Esteban Mancuso; de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Ignacio De Jauregui y Julián Jajurín; y de la Unión de Entidades Comerciales Argentinas (Udeca), Carlos Echezarreta.

Por la cartera laboral estuvieron el secretario de Trabajo, Marcelo Bellotti, y el secretario de Conciliación del Departamento de Relaciones Laborales, Pablo Greco.

En la reunión de la mesa tripartita, Cavalieri expuso las demandas y necesidades de los trabajadores en “el actual difícil contexto” y “el duro impacto provocado por la remarcación de precios, el proceso inflacionario y el elevado costo de vida”, por lo que la negociación fue “un elemento clave para contrarrestar el desfase inflacionario”, afirmó.

Cavalieri señaló, además, que por “la vía del diálogo como herramienta superadora y de la discusión madura pudo suscribirse una actualización del convenio para llevar alivio a los empleados de comercio y contrapesar el proceso inflacionario”, y en ese sentido evaluó que “la aplicación de la cláusula de garantía fue un mecanismo eficaz para proteger el salario”.