La secretaria de Legal y Técnica de la Presidencia explicó que se reciben viajeros del exterior “en lugares seguros, donde podamos hacer el PCR”.
Una vez que el presidente Alberto Fernández anunció este miércoles que “la Argentina entró en la segunda ola” de contagios de coronavirus y las nuevas medidas restrictivas que estableció para enfrentar la pandemia, la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, explicó qué pasará con los vuelos al exterior.
“No hemos innovado al respecto. El Gobierno ya dijo que tiene las fronteras cerradas, la gente que sale al exterior sabe las dificultades que va a haber para regresar. No porque no se quiera que regresen, lejos de eso, pero que se sepa que nosotros tenemos que garantizar un regreso seguro que implique evitar que ingresen nuevas cepas”, indicó la funcionaria.
En diálogo con la TV Pública aseguró que los argentinos que ingresan en este momento al país lo hacen de forma segura. “Recibimos viajeros del exterior en lugares seguros, donde podamos hacer el PCR, cuidar los aislamientos y eso no se puede hacer masivamente, motivo por el cual hemos disminuido muchísimo las frecuencias de vuelos para regresar y saben quienes viajen que pueden tener demoras importantes para volver. El que sale, sale sabiendo esta situación”, remarcó.
Respecto de la circulación dentro del país, que el Presidente anunció que estará prohibida entre las 0 y las 6, Ibarra sostuvo que esa medida “se aplica solamente para los lugares de alto riesgo”, donde hay complicaciones con los contagios.
“No es en todo el país, solo en zonas de alto riesgo. Las actividades cierran a las 23, trabajadores y trabajadoras que tienen que ir a un trabajo van a tener autorización [para circular]”, agregó.
Asimismo, aseveró se ha visto en general que “los lugares de mayor contagio es donde nos relajamos más, encontrándonos con amigos, amigas, compañeros en horarios nocturnos”.
Con respecto a las restricciones de reuniones en casas privadas, sostuvo que, por el momento, esta medida implica que solo podría ir a su casa quien habita “salvo que haya asistencia de una persona”. Y concluyó: “Es solo por tres semanas, para parar los contagios. En principio nadie puede ir a la casa de otro, salvo excepciones”.