Lo admitió el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, en una audiencia en la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes.
Estados Unidos está preocupado por la intensificación de la actividad de Rusia en América Latina, incluyendo a Venezuela y Cuba, según admitió el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken.
“Comparto esa preocupación”, dijo el jefe de la diplomacia norteamericana en una audiencia celebrada en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes luego de que un legislador afirmara que Moscú trata de desestabilizar la situación en la región.
“Eso lo estamos viendo en Venezuela. Pienso que en los últimos años hemos visto el renacimiento de la presencia y actividad de Rusia en Cuba y estamos prestando mucha atención a ello en todas las direcciones”, aseguró Blinken.
El canciller ruso, Serguéi Lavrov, ya había declarado que Rusia se ha acostumbrado a que los “colegas occidentales tratan de encontrar, cada vez con mayor frecuencia, motivos que les unen en sus invenciones sobre la amenaza rusa o cualquier otra”.
Pandemia. Rusia logró contrarrestar el desplome económico que generó la pandemia de coronavirus, afirmó el presidente ruso, Vladímir Putin.
“El año pasado resultó ser el más difícil para la economía global desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Gracias a las medidas ponderadas y oportunas para apoyar a los sectores y a las empresas, en general, logramos superar la caída económica y llegar a la recuperación”, apuntó el jefe del Kremlin.
El líder ruso subrayó que en 2020 el Producto Interior Bruto (PIB) mundial se contrajo 3,5% debido a la pandemia y las restricciones impuestas para contenerla.