Alberto Fernández reconoció que “es difícil” trabajar desde la Nación pero se quejó de la “soledad” en la que lo dejan otros sectores del Estado.
El presidente Alberto Fernández reconoció hoy que “la reacción estatal frente a los femicidios es lenta o no existe” y reconoció que “es difícil trabajar desde la Nación” para frenar la violencia machista en Argentina, en el marco del Día Internacional de la Mujer.
Fernández encabezó hoy en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada un acto con gobernadores en el que fue suscripto el acta compromiso “Acuerdo Federal para una Argentina Unida contra la violencia de género”.
En el documento, los gobernadores y el jefe de Gobierno porteño se comprometieron a “integrar el Consejo Federal para la prevención y el abordaje de femicidios, travesticidios y transfemicidios; a adherir al Sistema Único de Registro de denuncias por violencia de género (URGE) y al Sistema Integrado de casos de violencia por motivos de género (SICVG), y a jerarquizar y fortalecer las áreas de género provinciales y municipales”.
Además, se explicó, se buscará “promover una rápida, coordinada y especializada gestión de los casos de violencias por motivos de género en el Poder Judicial de cada provincia; y fortalecer los espacios de formación y capacitación en perspectiva de género para las fuerzas policiales y generar mecanismos que faciliten la realización de denuncias en casos que involucren a miembros de las fuerzas de seguridad”.
También se comprometen a “garantizar que los establecimientos de salud cuenten con equipos interdisciplinarios que aseguren un adecuado abordaje de los casos de violencia por motivos de género”.
Para eso, los distritos trabajarán de manera coordinada y conjunta con el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación, articulando recursos, políticas y acciones en el marco del Plan Nacional de Acción contra la violencia por motivos de género 2020-2022.
Durante su discurso, el Presidente expresó su deseo de que “este día (por el Internacional de la Mujer) sea un día de respuestas” y pidió que, “del mismo modo que construimos memoria, verdad y justicia para los genocidas” lo hagamos para “poner fin a la desigualdad en cuestión de género” y a “los femicidios y la violencia contra la mujer” con “políticas de Estado” que trasciendan los Gobiernos.
Además, el primer mandatario recordó a las mujeres que perdieron la vida víctimas de la violencia de género, como Micaela García en 2017, que dio lugar a una ley específica de capacitación en materia de género para los tres poderes del Estado.
Fernández aseguró que más allá de si la palabra “femicidio” existe o no existe “en word”, “lo que existen son los femicidios”, que son “hechos que existían y estaban ocultos”, como parte de “la cultura patriarcal que generó un sinfín de injusticias y destratos, y se ha llevado vidas y lastimado la salud de las mujeres”.
También remarcó que “la reacción estatal frente a los femicidios es lenta o no existe”, asumió que “es difícil trabajar desde la Nación”, porque se hace “en soledad” con respecto a otros sectores y poderes del Estado y con sentido “voluntarista”, y mientras tanto “las violencias y femicidios siguen creciendo”.