Una diferencia entre la ley electoral bonaerense y la ley nacional ampliará la diferencia que había surgido en el escrutinio provisorio.
El candidato a gobernador bonaerense por el Frente de Todos, Axel Kicillof, finalmente le sacará 18 puntos de ventaja a la gobernadora María Eugenia Vidal en el recuento definitivo de los votos de las elecciones PASO del pasado domingo.
Con los datos del escrutinio provisorio, el exministro de Economía se impuso con el 49,34% de los votos contra el 32,56% de la candidata de Juntos por el Cambio que busca la reelección.
La diferencia es porque en el resultado provisorio de las primarias bonaerenses se computaron los votos en blanco para determinar el porcentaje de los precandidatos, en lugar de solo los votos válidos, como detalla la ley 14.086 que regula el mecanismo en la provincia de Buenos Aires, diferente a la ley nacional.
Sin embargo, la Dirección Nacional Electoral negó que exista un error en la carga de datos del recuento provisorio y aclaró que la ley establece que “sólo se tomen en cuenta los votos válidos positivos” para verificar qué fuerzas “superan el 1,5 por ciento necesarios para pasar a la elección general”.
“Para poder participar en la elección general, los partidos políticos, agrupaciones municipales, federaciones y alianzas transitorias electorales, deberán obtener como mínimo el 1,5% de los votos positivos válidamente emitidos (es decir sin contar los votos en blanco), aún en el caso de la lista única”, explicaron a Télam desde la Dirección Nacional Electoral.
La aclaración se dio después de que trascendiera que el apoderado del PJ, Jorge Landeau, señalara que “por un error en la carga de datos, el candidato a gobernador del Frente de Todos, Axel Kicillof, había obtenido en las PASO el 52,53 % de los votos en lugar del 49,34 %” que figura en la página web oficial de la provincia de resultados provisorios.
Siguiendo ese criterio, Vidal había obtenido el 34,6% de los votos en lugar del 32,56 que figura en la página oficial.
Desde la Dirección Nacional Electoral interpretaron que “la ley estipula que no se contabilicen los votos en blanco para ver qué fuerzas pasaron el umbral del 1,5%. Pero eso no significa que haya que contar necesariamente los votos válido positivos para dar los porcentajes”.