Los médicos del Hospital Israelita de san Pablo le indicaron reposo absoluto por una complicación infecciosa.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a una unidad de cuidados intermedios tras comenzar un tratamiento con antibióticos por una aparente infección contraída mientras se recupera de la tercera operación derivada del apuñalamiento que sufrió el año pasado, lo que motivó que su alta médica sea aplazada hasta el lunes próximo.
Según explicó el portavoz de la Presidencia, Otavio do Rego Barros, el mandatario presentó ayer una “subida de temperatura” y una “alteración” en algunos de sus análisis clínicos que indicaron un aumento de leucocitos, por lo que los médicos le administraron antibióticos de “amplio espectro” para “atacar cualquier tipo de infección”.
Los médicos encontraron líquido en la zona de donde se retiró la bolsa de colostomía que tenía el mandatario, que asumió el pasado 1º de enero.
El líquido fue drenado y ya no tendría ni fiebre ni dolor, pero no podrá dejar el hospital hasta el lunes, informó Do Rego.
“Fue identificada una colección líquida al lado del intestino, en la región de la antigua colostomía. (Bolsonaro) fue sometido a una punción” y “permanece con drenaje en el lugar”, explicó en un parte el equipo médico presidencial.
Según este informe, el jefe de Estado está “sin dolor, sin fiebre, en ayuno oral, con sonda nasogástrica y nutrición parenteral exclusiva”.
Asimismo, ya “presenta movimientos intestinales”, tuvo “dos episodios de evacuación” y sigue realizando ejercicios respiratorios y de fortalecimiento muscular.
Pese a las recaídas, Do Rego señaló que el cuadro de Bolsonaro está “dentro de lo esperado” por el cuerpo médico, considerando que pasó por tres cirugías en menos de cuatro meses, “dos de ellas de carácter de urgencia”.
Agregó que “no hay ningún aspecto negativo” respecto a la cirugía a la que el presidente fue sometido el pasado lunes, cuando los médicos le retiraron la bolsa de colostomía
Bolsonaro está siendo medicado “para enfrentar un eventual proceso infeccioso”, por lo que permanecerá internado en el Hospital Israelita Albert Einstein de San Pablo por al menos siete días más, explicó el vocero.
“El miércoles ya no será el día del alta de nuestro presidente porque ha entrado en una etapa en la que le están siendo administrados antibióticos por un mínimo siete días”, explicó en una rueda de prensa.
Según su vocero, Bolsonaro está en “reposo absoluto”, no tendrá compromisos oficiales en los próximos dos días y las visitas “están restringidas a familiares y personas cercanas”.