Ya son 49 los muertos y 300 los desaparecidos por el derrame de agua y barro producto de la fisura de tres diques en Brumadinho.
Ante el peligro “inminente” de rotura de otro dique de la minera Vale, las autoridades evacuaron hoy, domingo, a unos 24.000 pobladores de dos comunidades rurales cerca de la mina de Vale donde el viernes colapsaron tres represas con barro tóxico, lo que dejó hasta ahora un saldo de 49 muertos y unos 300 desaparecidos.
Las alarmas sonaron esta madrugada debido a que existe un riesgo elevado de que estalle otro de los diques de la mina Córrego do Feijao, en la localidad de Brumadinho, en el estado de Minas Gerais.
Los equipos de rescate evacuaron a los habitantes de Córrego do Feijao y Tejuco para trasladarlos a zonas más elevadas de la región.
La minera, propietaria de la explotación, confirmó en un comunicado que las alarmas esta vez sonaron en la zona de la mina Córrego do Feijao al “detectar aumento de los niveles de agua” en el dique VI, que forma parte del complejo. No había sucedido lo mismo el viernes con el primer derrame.
El sábado, las autoridades de Minas Gerais informaron que las víctimas fatales habían pasado de 34 a 40, pero luego rectificaron el dato, en medio de una divergencia de números entre las diferentes instituciones involucradas en la operación de rescate.
Los bomberos mantienen la esperanza de hallar a más personas con vida, a pesar de que solo fueron rescatadas 46.
Tras el desastre, la Justicia intervino las cuentas de Vale y determinó, en dos procesos distintos, el bloqueo de 1.621 millones de dólares de la compañía para el “inmediato y efectivo amparo a las víctimas y reducción de las consecuencias” de la catástrofe.