Tras doce días, los rescatistas no llegaron a tiempo al sitio donde se encontraba, a unos 70 metros de profundidad.
Los rescatistas encontraron esta noche el cuerpo sin vida de Julen, el niño de dos años que hace doce días cayó en un pozo en la localidad malagueña de Totalán, en España.
Lo hicieron tras excavar la totalidad de la galería horizontal por la que llegaron hasta el bebé, que estaba atrapado a más de 70 metros de profundidad.
Después de más de 24 horas de excavación ininterrumpida, los mineros avanzaron los poco más de tres metros que les faltaban para llegar al sitio donde se encontraba atrapado Julen.
Sin embargo, los últimos centímetros fueron muy difíciles ya que los expertos encontraron cuarcita, uno de los minerales más duros del mundo, lo que los obligó a realizar la cuarta minivoladura consecutiva que retrasó nuevamente el operativo.
Así, una vez que los equipos de rescate accedieron al punto del pozo donde se buscaba al paqueño y se localizó su cuerpo sin vida, se activó la comisión judicial.
El rescate, en el que venía colaborando desde el primer día un operativo de más de 300 efectivos que trabajaban por turnos, se inició el pasado 13 de enero luego de que se recibiera el aviso de la caída de un menor por un agujero de 25 centímetros de diámetro y 110 metros de profundidad en la zona conocida como Dolmen del Cerro de la Corona.