¿Recuerdan el “ya están aquí” que anunciaba la aparición de los espíritus malignos en la película Poltergeist (1982)? Pues lean la frase “es muy importante que en España exista un partido basado en la soberanía y la identidad del pueblo español y que esté dispuesto a defender sus fronteras”. Es de Steve Bannon, el exjefe de campaña de Donald Trump.
¿Dónde desembarcará Bannon? En el partido Vox, liderado por Santiago Abascal. ¿Cómo? De la mano de Rafael Bardají, ideólogo del proyecto de construir en España una extrema derecha homologable con sus equivalentes europeos y estadounidenses. Según nota de prensa de Vox, Bardají y Bannon se reunieron el 10 de abril de 2018 en Washington D.C., a lo que seguirá una visita de Bannon a Madrid antes de fin de año.
¿Quién es Bardají? El hombre que conectó a Aznar con la derecha neoconamericana; el hombre que lideró la carta conjunta de ocho líderes europeos en el Wall Street Journal apoyando la invasión de Irak. El hombre que desde FAES (la Fundación del PP presidida por Aznar) propuso el rearme electoral de la derecha española apelando a valores morales, religiosos y culturales (familia, identidad, religión), una derecha que a la manera del Tea Party americano hablara de aborto, inmigrantes, terrorismo e islam. El hombre que no sin sentido del humor utiliza en su perfil en redes sociales la foto de Darth Vader, ¿homenajeando? así a Richard Perle, la eminencia gris y arquitecto de la política de exterior de Bush al que todo el mundo se refería como “el príncipe de las tinieblas”.
Cuentan en Vox que han pedido a Bannon que les asesore en aquello que mejor sabe hacer: comunicación y gestión de redes, es decir, ingeniería electoral basada en big data y redes sociales. Abascal aprende rápido. Lean si no las 100 medidas que propone para salvar a España. Tan rápido aprende que en su primera entrevista en este diario ya despotrica contra George Soros, el multimillonario y filántropo de origen húngaro discípulo de Karl Popper, financiador de la red de fundaciones Sociedad abierta (Open Society) y enemigo íntimo de Viktor Orbán, al que acusa de financiar una llamada a la inmigración masiva. España, que estaba libre de partidos de extrema derecha populista y xenófoba, está a punto de engrosar el club de la nueva normalidad occidental. ¡Para que digan que Spain is different! Minusvalorar al tándem Bardají-Bannon puede ser letal. ¿Recuerdan el anodino chisporrotear de la televisión que precedía al desencadenamiento de la tragedia en Polteregeist?
* Publicada originalmente en elmundo.es