El ministro de Hacienda y Finanzas respondió sobre el acuerdo con el FMI, el dólar, la inflación, los salarios y qué sucederá con la economía de cara a 2019.
-Después de los anuncios de esta semana: desarme de Lebac, paquete fiscal, emisiones de deuda y suba de encajes, ¿dónde queda parada la economía?
-Fue una muy buena semana porque avanzamos con medidas concretas que impactan en el Presupuesto 2019. Cuantas más señales podamos dar en términos de que el déficit de 1,3 % del PBI para el año que viene está asegurado, mejor reaccionará la economía. Me gustaría destacar además dos aspectos de los anuncios de esta semana: un ajuste por $ 55.000 millones y el trabajo con gobernadores y ministros de provincias que cimentó la base para poder tomar estas medidas como la del Fondo Solidario Sojero, la eliminación de los reintegros a las exportaciones y la suspensión de la rebaja a las retenciones de harina y aceite de soja. Las medidas que anunciamos eran las que tenían más consenso con las provincias, generaron comprensión de los gobernadores. No podemos pedir apoyos, pero sí entendimiento. Y lo logramos.
-¿Es un costo para Macri lo de las retenciones? Se comprometió a lo contrario que hizo.
-No se modificó nada. En diciembre de 2019 las retenciones estarán en el lugar donde se prometió. Quitamos la distorsión entre poroto y aceite que no tenía justificativo y que generaba una distorsión.
-¿Y con Agroindustria? ¿Hubo debate?
-Como coordinadores planteamos el tema a Agroindustria y su ministro nos acompañó. Y Producción ayudó con los reintegros.
-¿Qué pasará con el dólar? ¿acompañará el ritmo de la inflación?
-La política cambiaria la decide el Banco Central. También las metas de inflación. Lo que sí puedo decir es que Argentina tiene un esquema económico que a grandes rasgos es la convergencia al equilibrio fiscal, integración al mundo y tipo de cambio flotante. Dentro de ello el peso fluctúa. La tarea del Banco Central es congeniar esas fluctuaciones con su meta de inflación.