El fiscal de Río Grande Marcelo Rapoport dijo que los delitos constituyen “crímenes de lesa humanidad” cometidos como “parte de un ataque sistemático”.
La Fiscalía Federal de Río Grande, en Tierra del Fuego, pidió la detención de 26 militares en la causa que, desde hace más de una década, investiga a oficiales y suboficiales por torturas y otros crímenes que sufrieron conscriptos argentinos durante la guerra de Malvinas en 1982.
Es la primera vez que en esta causa se piden detenciones por hechos que, para el fiscal Marcelo Rapoport, constituyen “crímenes de lesa humanidad” cometidos como “parte de un ataque generalizado y sistemático dirigido contra jóvenes reclutados y trasladados a la guerra del Atlántico Sur”.
En la acción penal impulsada por el fiscal Rapoport se investigan delitos cometidos en la isla Gran Malvina, “específicamente en el ámbito de la Fuerza de Tareas Yapeyú” que encabezaba el Regimiento de Infantería 5, dependiente de la III Brigada de Infantería, cuyo jefe era Parada.
“La aplicación generalizada de tormentos a la tropa resultó entonces la represión ilegal con la que las autoridades militares hicieron frente a los actos desesperados con los que los conscriptos -verdaderas víctimas de la hambruna, tal como antes se explicó- reaccionaron ante tremendas penurias”, señaló la Fiscalía en el extenso escrito.