Comió con los oftalmólogos Roberto y Roger Zaldivar, a quienes quería conocer por su prestigio internacional,
Luego de su participación en Buenos Aires en el encuentro con los presidentes Mauricio Macri y Sebastián Piñera, su presencia en la cena por los 30 años de la Fundación Libertad y su paso por la Feria del Libro, el escritor peruano-español Mario Vargas Llosa llegó a Mendoza, por donde paseó el fin de semana junto a amigos locales y su hijo Álvaro.
Ayer comió con los Zaldivar (Roberto y Roger), a quienes quería conocer por su prestigio internacional, según informó el portal MDZ.
Esto sucede cinco años después de aquella visita sorpresa que generó revuelo. Fue cuando el Nobel se fue caminando desde el hotel, cuando a su entonces esposa, Patricia Llosa, hasta una librería en San Martín casi Garibaldi y fue reconocido por los compradores.
En “La llamada de la tribu”, el nobel peruano revisita los autores que fueron fundamentales para transitar desde la izquierda hacia el liberalismo, en un tránsito que aún hoy le acarrea amores y odios.
Luego, junto a amigos locales, recorrió la ciudad de Mendoza y quedó maravillado con el parque San Martín, al que consideró “más espectacular que el Central Park de Nueva York”.
Ahora tendrá encuentros privados, como aquella vez, que incluyen al gobernador Alfredo Cornejo, a intelectuales y empresarios mendocinos, antes de pasar a Chile para visitar a Piñera.