Las consecuencias sobre la economía real del \”Brexit\” serán comparables con la crisis financiera de 2007-2008, pronosticó el megainversor.
Hace unos meses, George Soros, a los 85 años, había vuelto a la gestión activa de gran parte de su fondo de cobertura de alrededor de 30.000 millones de dólares, porque estaba convencido de que los mercados financieros se había desatado una nueva fase de inestabilidad. Se demostró que no había perdido la capacidad de análisis con la que predijo la crisis de la lira y la libra esterlina en 1992: las posiciones que ha tomado en las últimas semanas el oro, el activo refugio por excelencia, han generado fuertes ganancias el jueves por la noche y el viernes.
Pero ayer, Soros se ha dedicó a otra tarea, la de comentarista. En “Project Syndicate”, el portal que recoge las opiniones de casi todos los principales comentaristas económicos en el mundo, el megainversor describe el marco europeo, como se ve después del shock de Londres.
“El escenario de desastre que muchos temían se ha materializado -apunta Soros – haciendo la desintegración de la Unión Europea prácticamente irreversible”. La primera víctima del referéndum sobre el “Brexit” será la propia Gran Bretaña, en su opinión, pero los efectos económicos y políticos se extenderán al resto del continente: “Los mercados financieros en todo el mundo tienen la probabilidad de permanecer en estado de agitación hasta que termine la negociación por el complicado proceso de divorcio político y económico de la UE. Las consecuencias para la economía real serán sólo comparables a la crisis financiera de 2007-2008”, enfatizó.
Desde mayo, Soros Fund Management LLC viene vendiendo acciones y comprando oro y títulos de empresas mineras de ese mineral, anticipándose a las debilidades en los mercados.